Martes. A escasas horas del enlace más espeluznante jamás recordado, salen a la luz a la velocidad del rayo los detalles del banquete organizado por Beatriz Trapote y Víctor Janeiro. Tras la misión imposible de encontrar una finca a la altura de la pareja, la lista de invitados se resquebraja por momentos. La famosa cuchipandi fraguada en el concurso de trampolines podría dejar de ser tan cuchi y convertirse en una trifulca de egos con pocas ganas de compartir mesa y mantel envueltos en un cisma insalvable. Mientras Lydia Lozano prepara el chuminero para el fin de fiesta, la clase noble del grupo, léase los inseparables Sonia y Álvaro, declinan la invitación y se mofan en voz baja del esperpéntico espectáculo que promete ser el acontecimiento. Montados en un autobús y convocados a primera hora de la mañana, el paseíllo se antoja similar a la fiesta de Halloween. La reputada periodista metida a estilista de uñas conseguirá mezclar a los Janeiro, Campanario y Torres con una troupe de artistas de la España más profunda. José Manuel Parada, Encarnita Polo o María Jesús con la acordeón a cuestas son sólo algunos de los lumbreras que ocuparán las páginas de ¡HOLA! en forma de exclusiva. Una boda sin niños ni cámaras fotográficas por deseo expreso de los novios, que hará historia y quedará perpetrada en la memoria colectiva de todo el país como hizo en su día la niña de la Jurado. Una corrida matinal (así reza la invitación) donde no faltará el Paco, Paco, Paco o el truco o trato. ¡Cuánto arte!
Miércoles. La reaparición en portada de Mar
Flores continúa levantando ampollas y rellenando la parrilla vespertina muy a su
pesar. Con su currículo amoroso a debate en mesas redondas, la modelo asoma la
cabeza para defenderse y pedir prudencia. Mar se muestra sobrepasada ante los
últimos acontecimientos y dice no comprender que su pasado vuelva a estar de actualidad.
Si echamos la vista doce años atrás, Flores concedía una entrevista a modo de autobiografía
al diario El Mundo. Con treinta y dos años y varios escándalos en la mochila,
la de Usera relataba sus vivencias punto por punto y describía sin piedad a
cada uno de los hombres de su vida. De orígenes humildes y marcada por el matrimonio
convulso de sus padres, la bella Mar pormenorizaba sus relaciones con la fama,
el dinero, el poder y el sexo. Una crónica sin censura que dibujaba una
personalidad en permanente disputa consigo misma donde primaban las ansias de
protección y status social. La Mar inocente y trabajadora lidiaba con su parte
más frívola y se veía atrapada por sus pasiones más bajas. Unos fantasmas que
vuelven a planear sobre ella y que desempolvan su desengaño con Bertín Osborne,
sus noches interminables con Lecquio o las artes de Fernández Tapias para
retenerla a su lado. Una historia que creía enterrada pero que vuelve a convertirse
en su peor pesadilla. ¿Por qué el pasado siempre vuelve? ¿Es Mar víctima o
verdugo?
Julio, año 2001 http://www.elmundo.es/cronica/2001/308/1000109814.html
Jueves. Lourdes Montes no cesa en su empeño de
ser diseñadora. La esposa de Fran y su hermana pequeña, Sibi, ya han comenzado
sus clases en una conocida escuela de moda sevillana donde toman nota de
patronaje cual novatas. Tal es el talento que se atribuye la propia Lourdes,
que planea presentar su primera colección la próxima primavera. La abogada se
ha arrancado la toga y competirá próximamente por hacerse con la cartera de clientas
amantes del volante que hasta ahora se dejaban vestir por los Lucchinos o las Berrocales. La
pasarela SIMOF va camino de transformarse en La verbena de la Paloma. ¡Qué me
gusta un rebujito! Buen fin de semana, ¡y olé!